MIS DOS FAMILIAS

En Aix visité el nuevo cementerio, donde desearía levantar una capilla para depositar los restos venerados de mis dos familias…

Aceptaría que llevaran al lugar a todos los muertos para ser enterrados en el cementerio y que se celebrara la misa según la devoción, que ciertamente sería aprovechada por las almas de los nuestros.

Diario de Eugenio de Mazenod, Febrero 21, 1838, EO XIX

Eugenio amó a su familia desde su niñez: “Mi corazón no ha cambiado con la edad. Adora a  la familia. Me dejaría cortar en pedazos por algunos miembros de mi familia”.

A partir de 1816 los Oblatos se convirtieron también en su familia, deseando que “sea la familia más unida en todo el mundo.”

 

“Y sabemos que para los que aman a Dios, todas las cosas cooperan para bien[a], esto es, para los que son llamados conforme a Su propósito. 29 Porque a los que de antemano conoció, también los predestinó a ser hechos conforme a la imagen de Su Hijo, para que Él sea el primogénito entre muchos hermanos” (Romanos 8, 28-29)

 

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