ESTOY DE ACUERDO EN SER  COADJUTOR, NO DESEO UNA DIÓCESIS

La carta de Tempier y la persuación de Jeancard finalmente tuvieron éxito y Eugenio cedió ante la presión, enviando al Rey la carta solicitada.

Esta carta, mi querido Tempier, se la entregará Jeancard, quien de viva voz le dirá todo lo que hemos hablado. Sin embargo, le entregaré una carta, no para reñirle por el mal humor que ha mantenido en los últimos escritos de nuestra correspondencia. Comprendo estuviera algo contrariado al verme reacio ante ciertos proyectos; sin embargo, mis motivos estaban bien   fundamentadas en la razón, y sobre todo en la religión, para que mi resistencia le enfadara.
Por la carta recibida hoy, veo que su enfado persiste…  Sin embargo, debe haber recibido mi carta que salió el 27 de Gap, en la que le comentaba me proponía escribir al Rey.  Ya la he enviado y estará probablemente en sus manos pasado mañana; espero esté satisfecho y el primer artículo de nuestro asunto quedará pronto terminado a nuestra satisfacción.

Eugenio subraya lo importante:

Jeancard le dirá cómo consiento aceptar la coadjutoría y no quiero ninguna sede. Si por desgracia perdiera a mi tío, nadie me obligaría a aceptar la sucesión.

Carta a Henri Tempier, Agosto 31, 1835, EO VIII núm. 539

Esta entrada fue publicada en Uncategorized. Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *