UN AMPLIO HORIZONTE SE ABRE ANTE NOSOTROS

En 1834, las cinco comunidades de los Oblatos contaban con 26 Oblatos y 10 escolásticos entre Aix en Provence, Marsella, Laus, L’Osier en Francia y Billens en Suiza.

Tras conocer al recién nombrado Obispo de Ajaccio, Córcega, Casanelli d’Istria, quien solicitó a Eugenio enviar Oblatos para fundar un seminario mayor, Eugenio describe la situación al P. Guibert, quien por años le había animado a iniciar una nueva misión fuera de Francia.

Un amplio horizonte se abre ante nosotros, tal vez estamos llamados a regenerar al clero y a todo el pueblo de Córcega.
El Obispo nos llama para dirigir su seminario, y está dispuesto a confiarnos las misiones de su diócesis. No podemos negarnos, por poco que pudiésemos lograr; sería desesperante si no pudiéramos responder a tan apremiante invitación, que cumple nuestro deseo. Realmente podemos aceptar el ofrecimiento que hemos anhelado, y que no se nos cumpliría nunca más, de negarnos ahora.
Pero realizar esa tarea, nos implicará los mayores sacrificios. 

Carta a Hippolyte Guibert, Octubre 18, 1834, EO VIII núm. 493

El mismo espíritu nos sigue motivando actualmente:

No temerán presentar con claridad las exigencias del Evangelio y abrirán con audacia nuevos caminos para que el mensaje de salvación llegue a todos los hombres. Humildes ante la propia insuficiencia, pero confiando en el poder de Dios, se afanarán por conducir a todos, especialmente a los pobres, a la plena conciencia de su dignidad de seres humanos e hijos de Dios

Constituciones y Reglas OMI, C 8

Esta entrada fue publicada en Uncategorized. Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *