LA DIFICULTAD DE ENCONTRAR APENAS ALGUNOS DISCÍPULOS ENTRE TODOS LOS QUE HA RESCATADO POR SU SANGRE

El Padre Mille, formador de los jóvenes Oblatos en Suiza, había enviado a Eugenio un reporte de avance sobre algunos de los estudiantes. Uno de ellos había mostrado mal comportamiento y fallado a su vocación – algo que Eugenio siempre encontró difícil, pues lo veía como un rechazo directo al llamado de Jesús a seguirle.

… Necesitaba saber lo que me comentas sobre el fervor en el retiro, para consolarme de la falta de Saluzzo. Lo que siente no son tentaciones; ha sucumbido por completo a una infidelidad deplorable. Si vuelve, que poco espero debido a su resistencia a la gracia del retiro, podrá dar gracias a Dios por ese segundo llamado y le animo a ser más fiel esta vez, si no quiere arriesgar la eternidad.

Después expresa su consuelo a quienes muestran fidelidad y generosidad en su deseo de seguir el llamado del Salvador:

¡Viva Sicard! ¡He ahí un corazón dócil a la inspiración de la gracia! ¡Cuánto promete su generosidad! Hijo mío, ratifico la promesa hecha a tu Dios tan bueno, tan desconocido, y que apenas encuentra algunos discípulos entre tantos hombres rescatados por su sangre.

Carta a Jean Baptiste Mille, Noviembre 17, 1831 EO VIII núm. 408

Utilizando el lenguaje de su propia conversión el Viernes Santo y el del PREFACIO, observa cuán pocos de los rescatados por la sangre del Salvador responden a Su llamado. Una invitación a dar nuestro “sí” hoy, al recordar que somos “rescatados por Su sangre”.

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