El Registro de Entradas al Noviciado y otros materiales de archivo señalan que Juan Baptiste de Bausset, un miembro de la Congregación de la Juventud, estuvo en el primer grupo de novicios en Aix y en los Misioneros durante dos años. Cuando dejó los Misioneros él continuó viviendo con ellos mientras estudiaba derecho en la universidad. Es el punto de partida de un importante desarrollo de la casa de Aix. Había muchas habitaciones y algunas de estas eran usadas como residencia para estudiantes.
Juntando todos los registros vemos que unos catorce miembros de la Congregación de la Juventud entraron en el noviciado. Por otra parte, diecisiete de los jóvenes vivieron en la casa de la Misión desde 1816 en adelante, bien como postulantes, bien como estudiantes en los institutos de Aix. De estos, seis llegaron a ser sacerdotes diocesanos y uno de ellos Hermano de san Juan de Dios. Rey y Jeancard hablan de todo esto denominándolo como “una escuela apostólica”.
Aparte de los miembros de la Congregación de la Juventud, no tenemos otros registros que indiquen exactamente cuántos jóvenes vinieron a vivir a la casa de los misioneros mientras realizaban sus estudios en Aix. Es un punto interesante este contacto con los estudiantes, por lo que es una pena que muchos documentos fueran destruidos o se hayan perdido debido a las expulsiones de los religiosos de Francia. Es por esto por lo que no tenemos más detalles.
El contacto con los estudiantes continua hoy mediante tres proyectos:
El Pause-Midi, donde unos ochenta estudiantes se juntan cada día en nuestro claustro desde las 7:30 hasta las 14:00. Es un lugar de encuentro para ellos y un lugar de presencia de los Oblatos donde pueden escucharles.
El proyecto Oser, donde tenemos estudiantes que alquilan habitaciones, pero que también se encuentran regularmente con los oblatos como una pequeña comunidad. Cada estudiante tiene también un compromiso en un proyecto de la ciudad para ayudar a los demás. Unido a esto hay también un proyecto que ayuda a los estudiantes a encontrar alojamiento en Aix.
La Escuela de la Misión, no estando basada en Aix, continua la tradición de la “escuela apostólica” de Eugenio con la formación de los jóvenes que participan en las actividades misioneras con nosotros.