¡ES UN GOZO REALMENTE CELESTIAL! SERÍA PASAR DE UN PARAÍSO A OTRO

Otra mirada a la atareada vida del Obispo Eugenio.

“Hermosa ordenación de 43 candidatos. La ceremonia fue magnífica”.

Hubo ocho nuevos sacerdotes de la diócesis y entre ellos un Oblato, Marie Cyr Chauvet.

“Más tarde fui al ejercicio trimestral del Santo Rosario Viviente que esta vez se realizó en la iglesia de San Lázaro”.

Se refiere al grupo (hermandad) de le Rosaire-Vivant [Rosario Viviente], por iniciativa de Pauline Jaricot, fundadora y también participante de la Propagación de la Fe, que en 1833 contaba con un millón de miembros. El objetivo era rezar un misterio del rosario a diario y distribuir biblias.

“Así, pasé todo el día en la iglesia ¿dónde se está mejor? Respecto a la ordenación, recordé que a  menudo pienso qué habría mejor que poder pasar la vida cumpliendo tan hermosas tareas. ¿No sería uno feliz de morir realizándolas? Es un gozo realmente celestial. Sería pasar de un paraíso al otro”.

Diario de Eugenio de Mazenod, Junio 30, 1844, EO XXI

Esta entrada fue publicada en Uncategorized. Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *