NUESTRO SEÑOR, MODELO DIVINO, TENÍA MUCHO QUE SUFRIR CON SUS AMADOS APÓSTOLES

Lunes de la cuarta semana de Adviento

Pero Zacarías replicó: “¿Cómo podré estar seguro de esto? Porque yo ya soy viejo y mi mujer también es de edad avanzada”. El ángel le contestó: “Yo soy Gabriel, el que asiste delante de Dios. He sido enviado para hablar contigo y darte esta buena noticia. Ahora tú quedarás mudo y no podrás hablar hasta el día en que todo esto suceda, por no haber creído en mis palabras, que se cumplirán a su debido tiempo”.

Lc 1:18-20

Son discípulos que honran a su maestro. Que el buen P. Vincens se alegre de ello y lleve a ellos su pensamiento cuando encuentre alguna dificultad. Nuestro Señor, modelo divino, tenía mucho que sufrir con sus amados apóstoles que tan a menudo eran insoportables y fatigosos”.

Carta al Padre Bruno Guigues, Agosto 18, 1843, EO X núm. 812

Esta entrada fue publicada en Uncategorized. Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *