Lo intentan todo para suscitar o despertar la fe de aquellos a quienes son enviados, haciéndoles descubrir «quién es Cristo».
CC&RR, Constitución 7
Encontramos aquí un resumen breve de nuestro ministerio Oblato. Muy a menudo Eugenio es presentado solamente como un bienhechor con un amor especial al ayudar a los pobres. Claro que lo fue, pero su enfoque de “hacer el bien” y “servir a los pobres” era muy específico y claro: se trataba de reavivar su fe y acompañarlos en su trayecto de descubrimiento de “quien es Cristo” para ellos.
Eugenio no era básicamente un filántropo, trabajador social o ONG – utilizando una expresión contemporánea. Su amor por los pobres estaba enfocado a su fe y a su relación con Jesús Salvador. Esa es la razón por la que fundó a los Oblatos de María Inmaculada y nos dio este enfoque central para nuestra vocación.
Todas las obras de caridad en ayuda de los pobres habían de ser vistas bajo esa luz. En sus muchos años como Obispo de Marsella, constantemente comenzaba y mantenía nuevas causas caritativas para ayudar a los pobres y aliviar su sufrimiento tanto en lo material como en lo social. Su enfoque central siempre fue el Salvador – se aseguraba que todas las obras fueran confesionales en identidad y de que no hubiera duda de que era la Iglesia católica de Marsella la que lo hacía en el nombre de Jesús. Fue un fruto de su fe y tenía la intención de ser un signo tangible de evangelización.
(cf “Close to the People”. Eugene de Mazenod, Man, Missionary and Bishop” en Oblatio III – 2014/2, ver en especial las páginas 185-189: http://www.omiworld.org/upload/oblatio/oblatio-2-14-txt-stampa.pdf
“El Señor no nos pidió construir hermosas Iglesias, sino evangelizar al mundo” Oswald J. Smith