He recorrido muchas iglesias, a cual más hermosa. Ciertamente cualquiera de estos hermosos templos honraría a una ciudad.
Diario de Roma, Diciembre 4, 1825, EO XVII
Aquí todo es santo para aquel que viene como verdadero peregrino cristiano. Para mí, no veo más que apóstoles, mártires, santos confesores de todos los siglos. No hay un rincón en Roma que no sea un monumento para la fe o para la piedad.
Carta a Hippolyte Courtès, Diciembre 6, 1825, EO VI núm. 210
Yvon Beaudoin explica: “En cinco meses ve unas cincuenta iglesias. A algunas, multiplica las visitas, así va unas diez veces a Santa María la Mayor, a San Pedro y a la capilla Sixtina. De ordinario da una breve reseña de la historia, a veces anecdótica o incluso legendaria de cada una, y describe la arquitectura, las pinturas y las obras de arte que hay allí.
A veces se detiene simplemente porque en sus gestiones pasa al azar delante de una u otra iglesia. Con frecuencia va para celebrar la misa, asistir a una ceremonia religiosa con sermón, adorar al Santísimo en ocasión de las cuarenta horas, o también para ganar las indulgencias del jubileo”
Diario de Roma, Introducción, EO XVII, pág. 16
“La dignidad del artista está en su tarea de mantener despierto en el mundo el sentido del asombro.” Marc Chagall