REALIZAMOS NUESTRA MISIÓN EN Y A TRAVÉS DE LA COMUNIDAD A LA QUE PERTENECEMOS

Durante el retiro, Eugenio recuerda que la comunidad era uno de los elementos constitutivos no negociables de la vocación y forma de vida Oblata. Vivía en comunidad con Henri Tempier en Marsella, pero el punto de referencia era siempre la comunidad local establecida. Hasta que se estableció en Marsella, la comunidad principal fue la de Aix. Eugenio trató de vivir en comunión con el grupo.

me debo ante todo y sobre todo a esta familia por la que el Señor me ha dado tanto amor, la cual es para mí constantemente y tan justamente objeto de admiración…
Siempre, pues, viviré en la unión espiritual más íntima con ellos, y aguardando que podamos formar en Marsella una casa regular que nos procure parte de las ventajas que se dan abundantemente en nuestra querida casa de Aix, observaré mientras me sea posible la Regla en privado, conformándome en lo que se pueda incluso a las horas de los ejercicios.

Notas de Retiro, Mayo 1824, EO XV núm. 156

Actualmente nuestra Regla de vida hace eco de ello:

C. 37 Cumplimos nuestra misión en y por la comunidad a la que pertenecemos. Nuestras comunidades tienen, por tanto, carácter apostólico.

C. 38 Unidos por la obediencia y la caridad, todos, sacerdotes y Hermanos, somos solidarios en nuestra vida y actividad misionera, aun cuando, dispersados para el servicio del Evangelio, no podamos disfrutar más que en breves intervalos de las ventajas de la vida común.

Cada comunidad, ya sea casa ya distrito, adopta el ritmo de vida y de oración que mejor responda a su fin y a su apostolado.

Constituciones y Reglas

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