UNO DE NUESTROS PROPÓSITOS ES PROPORCIONAR AL CLERO MEDIOS ESPECIALES DE SALVACIÓN

El Padre Vincens acababa de predicar el retiro anual de los sacerdotes diocesanos en Marsella.

“El retiro pastoral fue dirigido por nuestro P. Vincens, y lo hizo de maravilla; fue uno de los más edificantes. Los sacerdotes dijeron que nunca habían tenido algo parecido; la semana se nos fue como un día. El sermón de clausura fue magnífico. Mi conclusión fue que el P. Vincens podría dedicarse muy útilmente a los ejercicios al clero, por lo que le daré esa misión, que cumple a satisfacción de todos”.

Diario de Eugenio de Mazenod, Septiembre 16, 1848, EO XXI

La formación y renovación personal de los sacerdotes ha sido una parte integral del ministerio Oblato desde el inicio, cuando la casa de Aix en Provence y después todas las demás casas Oblatas, daban la bienvenida a los sacerdotes diocesanos para retiros y tiempo de renovación personal.  La evangelización de la gente solo podía ser efectiva al tener y mantener un clero local competente.  Eugenio y la primera comunidad expresaron este ministerio en la primera Regla:

“Mantengan sacerdotes celosos, desinteresados y sólidamente virtuosos, y pronto atraerán de nuevo a su deber a los pueblos extraviados…”.

Regla de 1818, Capítulo primero, §3. Nota Bene. Missions, 78 (1951) pág. 15

Eugenio estaba consciente de que la época de la Revolución Francesa y sus consecuencias había llevado al daño ocasionado por lo sacerdotes que no fueron fieles a su vocación y responsabilidades.  Tristemente, lo que escribió entonces sigue siendo verdad en la actualidad, y este aspecto de nuestro carisma sigue siendo esencial:

“Todos están conscientes de los muchos males que han resultado del deplorable desastre de años recientes, como los males ocasionados por la apostasía de una multitud de sacerdotes, quienes, a pesar del glorioso ejemplo de tantos de sus hermanos, perdieron el fervor de su estado, atrayendo la ruina sobre ellos y muchos otros. Es debido a esta situación, que nuestra Sociedad, con igual celo y perseverancia, toma también como uno de sus propósitos allegar medios especiales de salvación a dichos sacerdotes”.

Regla de 1826, Capítulo Uno, §1, Art. 6

REFLEXIÓN

«Como sacerdotes, apoyen a su pueblo con oraciones, para que a su vez, la gente los apoye con oraciones y amor, pues sin ellos, no es posible realizar la tarea”. (Arthur Middleton)

Como Familia Mazenodiana, demos apoyo y renovación a nuestros sacerdotes.

Esta entrada fue publicada en Uncategorized. Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *