ADMIRO LOS MEDIOS QUE EMPLEASTE PARA LLEVAR A ESE ESPÍRITU DIFÍCIL A PENSAMIENTOS MÁS RAZONABLES

En la reflexión anterior vimos la carta de Eugenio al Obispo de Gap, con relación al Santuario de Notre Dame du Laus. Ahora Eugenio escribe directamente al P. Guibert, acerca de la misma delicada situación.

Admiro el medio que empleaste para llevar a ese espíritu difícil a pensamientos más razonables, y al encargarte de todo el asunto, me sacaste de apuros y salvaste la situación, pues el terreno al que Mons. de Gap había llevado la discusión solo tenía una lamentable salida.

Yvon Beaudoin nos explica el antecedente: “El Obispo y clero de Gap ya pensaban reasumir la dirección de N.-D. du Laus y hacerla una casa de retiro para los sacerdotes ancianos. En cuanto a esto último, el Padre Guibert estaba listo para aceptarlos, pero el Obispo Arnaud encontró sus condiciones demasiado onerosas. El Obispo de Gap siguió buscando faltas en los Oblatos, en especial respecto a los intereses que habían mostrado en Lamennais y su enseñanza moral inspirada por San Alfonso. Sin decir más acerca de despedir a los Oblatos, pidió que al menos se reasignara al Padre Guibert. El Obispo de Mazenod se rehusó, pidiendo al superior comentar de ello al prelado, quien dejó todo como estaba. La mejor relación que había ahora entre el Obispo Arbaud y el Padre Guibert relevó al Fundador de una situación embarazosa: básicamente, era su enseñanza moral y la relación anterior con Lamennais lo que no aprobaba el Obispo.”

La razón, los procedimientos y justicia estaban de nuestra parte; la fuerza y la arbitrariedad en sus manos, y las hubiera utilizado, dado su carácter y  educación. No exageró en lo dicho acerca de las doctrinas Lamennesianas. Esos señores han confundido siempre la estimación que tengo hacia el autor, sin hacer distinción alguna de la época. También apruebo  totalmente la conducta que propone seguir con él; debería dejar los obstáculos que opone a las vocaciones…

Carta a Hippolyte Guibert, Marzo 25, 1833, EO VIII núm. 444

Nuevamente, un ejemplo de los temas delicados y situaciones engañosas que Eugenio tuvo que evitar en bien de la Congregación Oblata.

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