Una vez que el período de seis meses de prueba era completado el joven podía solicitar la plena admisión. Su solicitud y sus cualidades serán discutidas por el consejo, el cual, si le consideraba capaz, le recomendaría para ser aceptado por el Director. La ceremonia de recepción era celebrada con solemnidad litúrgica dos veces al año y tenía que estar precedida por un día de ayuno (si era mayor de 21 años) o realizar algún tipo de mortificación y finalmente la confesión de sus pecados.
Hoy, 26, todos los congregantes que han hecho la primera comunión y que no habían asistido a la hermosa ceremonia del 2 de febrero del año pasado, renovaron las promesas del bautismo e hicieron su consagración a la Santísima Virgen entre las manos del Sr. Director. Todo se hizo conforme a los reglamentos, con solemnidad, y sobre todo con tanta piedad que muchos vertían lágrimas de felicidad. Dios derramó sensiblemente su gracia en los corazones bien dispuestos de la mayoría de los congregantes que no cabían en sí de alegría y la testimoniaban en la forma más expresiva y con los términos más emotivos al salir de la capilla.
Diario de la Congregación de la Juventud, el 26 de junio 1814, E.O. XVI
Al final de este periodo de formación cada miembro de la congregación de la juventud era admitido a ser un miembro de pleno derecho por una profesión en un acto de Consagración y firmarlo. la consagración era realizada a través de la intercesión de María Inmaculada y el corazón de la oración consecratoria era el corazón del espíritu propio de Eugenio, el cual los congregantes habían tomado como su propio espíritu.
Hacemos también por estas presentes solemnemente profesión de reconocer a N.S. Jesucristo por nuestro Dios y Salvador, Soberano Señor y Maestro, del que queremos ser fieles servidores durante toda nuestra vida.
La copia original contiene las firmas los congregantes. Se encuentra en el Archivo General OMI, Roma., (DM VIII 3)