UN MINISTERIO PARROQUIAL ES “OBLATO” EN TANTO DE UN TESTIMONIO  TANGIBLE DE NUESTRO CARISMA (Constitución 9)

Anuncian la presencia liberadora de Cristo y el mundo nuevo que nace de su resurrección. Escuchan y hacen que se escuche el clamor de los sin voz, que apela al Dios que «derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes» (Lc 1:52).  (Constitución 9)

Es necesario hacernos una pregunta en nuestras muchas parroquias en todo el mundo: “¿Cuál es la diferencia entre una parroquia Oblata y las parroquias diocesanas a nuestro alrededor?  ¿Puede la gente ver y sentir alguna diferencia?”

“Este llamado es abordado de forma especial en nuestro ministerio parroquial, donde tenemos una fuerte presencia. Las parroquias Oblatas, que deben tener una naturaleza misionera particular, son los lugares apropiados, por ejemplo, para ofrecer una respuesta adecuada a la gran indiferencia hacia la tragedia de la migración y la degradación de la creación.  El trabajo conjunto de los Oblatos y laicos en dichas comunidades cristianas, puede ser la base para recuperar el “sentido de responsabilidad por nuestros semejantes sobre el cual se funda toda sociedad civil”. (LS 25).   (Actas del Capítulo General, 2022 núm. 13) 

“Sobre el tema de estar al servicio de los católicos en Bytown, sabemos que es bastante desagradable que nuestros Padres lo hagan de forma muy similar al ministerio parroquial. Se ha sabido que en varias ocasiones han dicho que deseaban ser misioneros, no sacerdotes parroquiales.  Deben poder organizar su tarea como algún tipo de misión…”

Carta al Obispo Bruno Guigues, Septiembre 26, 1848, EO I núm. 103

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1 respuesta a UN MINISTERIO PARROQUIAL ES “OBLATO” EN TANTO DE UN TESTIMONIO  TANGIBLE DE NUESTRO CARISMA (Constitución 9)

  1. Rosa Emilia Simbron Cano Vda. De Távara LaOMI dijo:

    Gracias a Dios, a nuestra Madre Santísima y a San Eugenio, por fortalecer el carisma Oblato en nuestros sacerdotes OMI, con sus diferencias logran compartir y sembrar el amor apasionado por Cristo, por la Iglesia y el llamado permanente a la Misión, desde nuestra vida diaria, en donde estemos, hacia los más pequeños de y para Gloria sólo de Él. Bendicelos, fortalece sus vidas y vocación Señor.

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