SAN EUGENIO: PEREGRINO DE LA ESPERANZA EN COMUNIDAD DE CELO Y CARIDAD

(Quinta “señal del camino” de Eugenio para el peregrino)

En el testamento de San Eugenio a su familia misionera encontramos las características del peregrino Mazenodiano:

 “Practiquen entre ustedes la caridad, la caridad, la caridad, y fuera el celo por la salvación de las almas”.

Este fue nuestro signo distintivo desde el comienzo:

“Después de dos intensas semanas de vivir la experiencia de realizar una misión parroquial juntos por primera vez, en la que prácticamente trabajaron día y noche sin descanso, Eugenio exclamó:
“Entre nosotros, los misioneros, somos lo que debemos ser, es decir, que todos tenemos un corazón, un espíritu y un solo pensamiento, ¡es admirable! Al igual que nuestras dificultades, nuestro consuelo es inigualable”.

Carta al P. Henri Tempier, Febrero 24, 1816, EO VI núm.10

La Comunidad no es una realidad geográfica, sino una forma de vida que se practica abarcando incluso la distancia y la separación física:

 “Esta es la única forma de reducir las distancias: estar al mismo tiempo en presencia de nuestro Señor, que es por decirlo, estar uno al lado del otro. No nos podemos ver, pero percibimos la presencia del otro, nos escuchamos, nos postramos ante el único y mismo punto central”.

Carta al P. de l’Hermite, Enero 10, 1852. EO XI núm. 1096

PALABRA DE DIOS

“Porque donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos”. 
Mt 18:20

 «a la Iglesia de Dios que está en Corinto. A ustedes que, consagrados por Cristo Jesús, han sido llamados a ser pueblo de Dios en unión con todos los que invocan en cualquier lugar el nombre de Jesucristo, que es Señor de ellos y de nosotros, gracia y paz de parte de Dios nuestro Padre y de Jesucristo, el Señor.
Doy gracias a Dios continuamente por ustedes pues les ha concedido su gracia mediante Cristo Jesús, en quien han sido enriquecidos abundantemente con toda palabra y con todo conocimiento. Y es tal la firmeza que ha conseguido el testimonio de Cristo entre ustedes…
Les ruego, hermanos, por nombre de nuestro Señor Jesucristo, que se pongan de acuerdo para que no haya divisiones entre ustedes, sino que conserven la armonía en el pensar y en el sentir”.

I Corintios 1:2-6;10

ORACIÓN

Dios, Padre nuestro,
que por la gracia del Espíritu Santo
hiciste un llamado a San Eugenio de Mazenod
para congregar una familia misionera
para ser una comunidad en corazón y mente.
Que podamos crecer en la unidad y dar testimonio ante el mundo
de que Jesús vive entre nosotros
y nos une para poder enviarnos a proclamar el reino de Dios.
Que podamos recibir a través de la intercesión de San Eugenio
las gracias especiales que pedimos como Peregrinos de la Esperanza.

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