ES MUY IMPORTANTE QUE TODOS CONFIESEN EN VOZ ALTA SU FIDELIDAD 

Al recordarle al Padre Guigues de la importancia de algunas ceremonias en las misiones parroquiales, Eugenio escribe acerca de los gestos que lleven a la renovación de las promesas del bautismales, ligado a la promesa de seguir y vivir de acuerdo a los diez mandamientos.

La renovación de las promesas del bautismo es obligatoria. Nuestra tradición es exponer el Santísimo Sacramento en forma solemne. La nueva promulgación en un pueblo que de algún modo había renunciado a los preceptos divinos y que desea volver al Señor, debe hacerse de manera tal que deje impresiones profundas.

La gente debía tener una participación activa en ello.

Por eso es muy importante que todos confiesen en voz alta su fidelidad bajo la interpelación del misionero, que repite desde el púlpito con el pueblo cada mandamiento promulgado desde el altar por el oficiante con voz sonora e inteligible, comentándolo después. Sin embargo, si por alguna circunstancia que yo consideraría deplorable, se temiera no estar en condiciones de llevar al pueblo a esa manifestación, se podría contentar con que el misionero repitiera el mandamiento desde el púlpito, a nombre del pueblo.

Carta a Bruno Guigues, Noviembre 5, 1877, EO IX núm. 652

Ver:  http://www.eugenedemazenod.net/esp/?p=534

“Pongo hoy como testigos contra ustedes al cielo y a la tierra: te he dado a elegir entre la vida y la muerte, entre la bendición y la maldición.

Elige la vida y vivirán tú y tu descendencia. Ama al Señor tu Dios, obedécele y sé fiel a él; de esto depende la vida, y el Señor te concederá muchos años de vida para habitar en la tierra que él te había prometido según juró a tus antepasados, a Abrahán, Isaac y Jacob.”

(Deuteronomio 30:19-20)

Esta entrada fue publicada en Uncategorized. Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *