AL  PIE  DEL  ALTAR  ESTABAN  DISPUESTOS  A  SALIR  PARA  NUEVAS CONQUISTAS 

Aniversario de la aprobación del instituto por la Santa Sede… La renovación prescrita por el capítulo se hizo inmediatamente después en mi presencia, por todos los sacerdotes y oblatos. Los novicios asistieron también… Una vez hecha la renovación, de rodillas ante el santísimo expuesto y con un cirio en la mano, se colocaron de pie y en círculo alrededor del altar…

Desde nuestra aprobación por el Papa el 17 de febrero de 1826, ha sido costumbre de los Oblatos renovar sus votos ese día.

La ceremonia de esta mañana no fue solo imponente, como siempre, sino conmovedora, podría también decir como es siempre, por el sentimiento que nos comunicábamos mutuamente al estar reunidos en la sala de comunidad.

Los Misioneros, cooperadores de Jesús Salvador, le agradecieron su éxito en las misiones y pidieron sus bendiciones para las que estaban por comenzar.

Lo que había de especial, y no dejé de señalar en el pequeño discurso que acostumbro a hacer este día, es que al pie del altar estaban dispuestos a salir para nuevas conquistas los mismos que vinieron a dejar en él su agradecimiento por el admirable éxito de las misiones recientes.  ¡Qué bendiciones, en efecto, habían recibido en Fontvieille y Entraigues! El Señor les acompañará en Maussane y Mane, bendiciendo como siempre, el trabajo que hemos emprendido en su nombre.

Diario de Eugenio de Mazenod, Febrero 17, 1837, EO XVIII

Cada día somos invitados también a llevar nuestros éxitos al Salvador y renovar nuestra confianza en su presencia, para acompañarnos en nuestros momentos de dificultad.

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